Dijo Jesús a sus discípulos: Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. Y comenta san Francisco: -Son verdaderamente limpios de corazón quienes desprecian las cosas terrenas, buscan las celestiales y no dejan nunca de adorar y contemplar, con corazón y alma limpios, al Señor Dios vivo y verdadero (Adm 16).
"La Regla y la vida de los franciscanos seglares es ésta: guardar el santo Evangelio de nuestro Señor Jesucristo siguiendo el ejemplo de San Francisco de Asís, que hizo de Cristo el inspirador y centro de su vida con Dios y con los hombres. Los Franciscanos seglares dedíquense asiduamente a la lectura del Evangelio, y pasen del Evangelio a la vida y de la vida al Evangelio."
No hay comentarios.:
Publicar un comentario